ASESORAMIENTO LEGAL

"Cuando tomé la decisión de separarme de Óscar, lo que más me preocupaba era el bienestar de mis hijos, Sol y Leo. Quería atravesar este proceso con la mayor conciencia posible, y necesitaba sentirme segura y bien acompañada.

Desde el primer momento, trabajar con Maribel fue una experiencia de calma dentro del caos. Me he sentido arropada, escuchada y con la certeza de que no estaba sola, ni siquiera en los momentos más inciertos. Era la primera vez que vivía algo así, y contar con alguien que me guiara con empatía, firmeza y claridad ha sido fundamental.

En cada paso, Maribel ha estado ahí para resolver dudas, darme orientación y sostenerme en decisiones difíciles. No fue solo una cuestión jurídica, fue un acompañamiento humano y profesional que marcó la diferencia.

Recomendaría a Creada sin pensarlo. No solo por la profesionalidad, sino porque se nota que hay corazón detrás de cada caso. Gracias, de verdad, a todo el equipo."

Sara Yanes.

"Mi experiencia con Anabel ha sido fantástica. Al llegar a ella no tenía claro hacia dónde íbamos, y gracias a su cercanía, humor, flexibilidad, humanidad y empatía hemos podido hacer un proceso de separación amistoso. 

Ha dejado que lleváramos nuestro propio ritmo sin presión de ningún tipo. 

Con ella me he sentido en todo momento muy arropada y acompañada. "

Lucía Vaquero.

"Acudí a Creada tras un proceso de divorcio en el que se había establecido una custodia monoparental exclusiva. Mi deseo era revisar esa situación y valorar la posibilidad de una custodia compartida, pero no tenía información clara sobre cómo iniciar una modificación de medidas ni qué implicaba realmente.

Desde el primer momento, Maribel me hizo sentir apoyada, escuchada y acompañada. Su forma de trabajar ha sido siempre neutral, respetuosa y centrada en el bienestar de nuestras hijas. Yo sabía que quería una mediación y no un enfrentamiento, y en ese sentido el acompañamiento de Maribel ha sido clave: profesional, empático y absolutamente orientado a construir.

A lo largo de estos meses hemos podido ordenar los aspectos esenciales del nuevo convenio, negociar puntos que ni siquiera habíamos considerado al inicio y, sobre todo, alcanzar acuerdos que hoy sentimos justos y necesarios para nuestras hijas.

Recomendaría a Maribel sin dudarlo. Porque una separación, especialmente cuando hay hijos de por medio, no puede dejarse en manos de la improvisación o del conflicto. Se necesita mirada legal, pero también humana. Y eso, en Creada, lo he encontrado.

Gracias, Maribel, por tu acompañamiento durante todo este proceso."

Anónimo.

"Llegué a Creada después de una ruptura muy dolorosa. Me encontraba perdida, con miedo a enfrentar todo el proceso legal que conlleva una separación con hijos, y con una enorme necesidad de sentirme comprendida.

Desde el primer momento, Anabel fue más que una abogada: fue una guía y un sostén. Me sentí segura, escuchada y, sobre todo, acompañada en cada paso. Supo explicarme con claridad todo lo que necesitaba saber, sin tecnicismos ni prisas, y me ayudó a tomar decisiones importantes desde un lugar de calma y consciencia.

El acompañamiento de Anabel no solo fue impecable desde el punto de vista legal, sino también profundamente humano. Gracias a su implicación, he podido atravesar este proceso sin sentirme sola, sabiendo que mis derechos y los de mi hija estaban cuidados en cada detalle.

Recomiendo Creada sin dudarlo. No solo por la profesionalidad, sino por la sensibilidad y el compromiso con el que trabajan. En momentos de tanta vulnerabilidad, eso marca toda la diferencia.

Gracias, Anabel, por estar ahí con tanta humanidad y tanto rigor."

P.C.

"Antes de llegar a Creada, habíamos firmado un acuerdo en una agencia de mediación de la Comunidad de Madrid. Aunque partía de buenas intenciones y tenía cierta base legal, dejaba muchos flecos sin cerrar. Funcionan si la separación es completamente amistosa, pero en nuestro caso, con desacuerdos profundos en valores, crianza y convivencia, no fue suficiente. 

Seguíamos atrapados en el conflicto y sin poder avanzar hacia una verdadera reconfiguración familiar.

Mi mayor preocupación era cómo iba a afectar todo esto a nuestro hijo. Sentía que necesitábamos una guía clara, especialmente en lo legal, para no seguir improvisando ni arrastrando tensiones. Y lo que encontré en Maribel fue justo eso: claridad, acompañamiento y límites firmes —los que marca la ley y también los emocionales— para protegernos a todos.

Me he sentido cómodo en todo momento. Maribel supo respetar nuestros tiempos, me sentí escuchado de verdad y me ayudó a entender cada paso. No se trató solo de firmar un acuerdo, sino de comprender lo que estábamos haciendo y por qué.

Recomendaría a Maribel sin dudar. He sentido cercanía, empatía y una forma de trabajar que apuesta por el acuerdo y el entendimiento, sin perder de vista lo más importante: que los hijos necesitan una base estable, también desde lo jurídico. Gracias, de corazón, por hacer este proceso más humano."

Juan.